Voces proféticas: Ser puentes para una nueva época
Del 26 al 30 de abril se celebró el sexto Congreso Católico Nacional de la Pastoral Hispana de los Estados Unidos en la ciudad de Washington DC. El evento fue organizado por el Consejo Nacional Católico para el Ministerio Hispano (NCCHM, por sus siglas en inglés), que integra a las principales instituciones nacionales de Pastoral Hispana en los Estados Unidos y que preside Elisabeth Román.
Participación de la Delegación Nacional
El congreso contó, por primera vez, con la participación de representantes de la Delegación Nacional de las Comunidades Católicas de Lengua Española en Alemania. El delegado nacional, padre Ferran Jarabo, asistió junto con Joaquín Simó, director del Departamento de Formación.
Signos de esperanza
El VI Congreso Raíces y Alas se convirtió en un signo de esperanza, poniendo en evidencia la madurez comunitaria, integración y buen hacer del pueblo de Dios hispanohablante que peregrina por los Estados Unidos. Las múltiples conferencias, celebraciones, visitas y actividades transcurrieron en ambiente de unidad y fraternidad eclesial.
Superando las expectativas de los organizadores, al congreso asistieron líderes hispanos comunitarios de todo el país, entre los que se encontraban, 65 sacerdotes, 16 arzobispos y obispos. También son de destacar, entre otros, la presencia del nuncio apostólico en EE.UU., el presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU. (USCCB), el presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), la directora del Centro Bíblico Teológico Pastoral para América Latina y El Caribe (CEBITEPAL) y los secretarios de la Pontificia Comisión para América Latina (CAL). Una experiencia sinodal en la que los 411 participantes, tuvieron la oportunidad de hablar y ser escuchados.
Como fruto del V Encuentro Nacional de la Pastoral Hispana/Latina se abordaron cuatro prioridades en Raíces y Alas: Justicia Social, Familia, Pastoral Juvenil Hispana y Formación. Los jóvenes tuvieron una presencia y participación activa a lo largo de todo el congreso. Un exponente de ello fue la conferencia del joven de 18 años Martín Soros, al recibir el premio Alas, en la que abordó de forma decidida muchas de las cuestiones candentes en la vida de la Iglesia.
Sabías que En EE.UU. existen más de 10,5 millones de indocumentados. Muchos de ellos viviendo más de 15 años en el país. En el 2018 los indocumentados aportaron 20 billones en pago de impuestos federales y 12 billones en impuestos estatales y locales. Top 7 por países de origen: México, El Salvador, Guatemala, India, Honduras, China y Venezuela |
Los líderes católicos mantuvieron reuniones presenciales y virtuales con los congresistas, republicanos y demócratas, en el Capitolio. Los congresistas de más de 30 estados pudieron escuchar sus testimonios, propuestas y peticiones con el único objetivo de lograr una urgente reforma migratoria.
Otro signo del creciente papel y presencia hispana en la Iglesia estadounidense fue la celebración, por primera vez, de una Eucaristía en español en la Basílica Nacional y Santuario de la Inmaculada Concepción.
Los participantes en el congreso regresaron a sus comunidades con el compromiso firme de ser voces proféticas y tender puentes, impulsados por las palabras con las que Mar Muñoz-Visoso, directora de la Secretaría de Diversidad Cultural en la Iglesia de la USCCB, finalizó el discurso de apertura de Raíces y Alas:
“Profetiza pueblo de Dios con tu voz y con tus obras; sé el puente que acarrea la buena nueva de Dios para la familia, para los jóvenes, para el inmigrante y el marginado, para aquellos que habitan en las periferias existenciales de la Iglesia y de la sociedad; para aquellos que tienen hambre y sed de justicia; para aquellos que quieren formarse más para servir mejor”.
Sabías que Los alemanes fueron el grupo más numeroso de migrantes en los Estados Unidos antes de las actuales migraciones masivas de población hispana. Los hispanos están presentes en lo que hoy es el territorio de EE.UU. desde mucho antes de que llegara el Mayflower. El español es la primera lengua europea que se habló en EE.UU., mucho antes que el inglés. Estados Unidos no tiene un idioma oficial. No lo establece la Constitución ni existe un documento que así lo declare. |