Así como la naturaleza se renueva con el paso de las estaciones, la vida de nuestro interior vuelve a brotar cuando pedimos al Espíritu Santo que nos restaure. “Renuévanos, Señor, con tu Espíritu” fue precisamente el lema del retiro de verano de la asociación Católicos Hispanohablantes en Alemania, guiado por el padre Gerardo, de Venezuela.
El Espíritu acudió a la cita y cumplió con los numerosos participantes, como no podía ser de otra manera.
Eso nos cuenta, por ejemplo, el testimonio de Cinthia, de Mannheim, que en los momentos de oración y compartir con los hermanos, sintió reforzado su llamado a servir y a misionar allí donde le toca, y que al ver el estreno de la película sobre San José descubrió, en él, a un santo cercano, a quien se puede acudir no sólo con nuestras necesidades de trabajo, sino también, para sanar heridas y pedir por nuestras situaciones familiares y de proyecto de vida.
Fue una fiesta de la gracia para grandes y para niños. Todos adoramos y agradecimos al Señor por su obra en nosotros. Gracias a las enseñanzas de los servidores que vinieron de Regensburg, Marburg, Mainz y hasta desde Freiburg, ganamos fuerzas para seguir alabando a Dios en todo momento, para anunciar y también para recibir en abundancia.
El padre Gerardo puso todo su amor y experiencia para guiar el retiro y se llevó a su viaje de vuelta a Madrid, como recompensa, el corazón lleno de hermanos que rezarán por su ministerio, agradecidos por tanto cariño.