Sesiones 3 de mayo y 5 de julio 2023
Monseñor Luis Solé Fa, Obispo Emérito Diócesis de Trujillo, promotor Campaña Infantil y de las Juventudes Marianas Vicencianas en Honduras
Darles protagonismo a los jóvenes es una tarea difícil, pero es la mejor tarea de todas
Los jóvenes también deben descubrir que tienen necesidad de salvarse
El obispo español asentado desde 1979 en Honduras, Monseñor Luis Solé Fa en el desarrollo en línea del X Encuentro Formación Permanente para Sacerdotes –Identidad Sacerdotal– 2023, manifestó que el papel actual de las misiones es acompañar a la juventud en una nueva dinámica cultural, en darles protagonismo, en aceptar las equivocaciones y en donde descubran que tienen, también, necesidad de salvación, es una tarea difícil, pero es la mejor tarea de todas.
Para Monseñor Solé la iglesia siempre ha acompañado a la juventud. Y actualmente, “los jóvenes deben aprender a aceptar que se pueden equivocar, que están influidos -y soportan mucha presión- por una sociedad que los quiere hacer un consumista más”, enfatizó. Además señaló “que los jóvenes también deben descubrir que tienen necesidad de salvarse de este mundo, de salvar el planeta, de salvar su propio futuro”. El que fuera impulsor de las Juventudes Marianas Vicencianas cree firmemente que esa debe ser la propuesta de la iglesia sin que exista miedo, “no debemos tener miedo, que si se rompen esquemas, pues que se rompan. Eso es lo que el Papa Francisco está haciendo y es lo que deberíamos hacer todos, cada quien desde su propia realidad”, aseguró. En este mismo sentido, Solé recordó con alegría al padre Antonio Quetglas, compañero de proyectos misioneros, cuando en el año 1979 trabajaron en la Campaña Infantil y después se plantearon fundar las Juventudes Marianas con el apoyo de España (inicialmente en San Pedro), pues en esa ocasión también vencieron los miedos y rompieron esquemas para lograr el objetivo. Estos esfuerzos dieron como fruto la fundación de las Juventudes Marianas Vicencianas en Honduras en el año 1985.
Evangelizar culturas
La necesidad de evangelizar culturas es imperiosa, asegura Solé. Y de acuerdo al tema se plantea varias interrogantes: ¿Cómo penetrar una cultura? ¿Cómo reproducir el mandato de Jesús? ¿Cómo tomar el concepto de salvación? Monseñor considera que “la salvación es una oferta que hacemos los católicos, pero que no responde a una demanda. Nadie viene a decirnos -padre venga a evangelizarnos, corran a evangelizarnos-, nadie lo pide, pero nosotros tenemos la obligación de ofrecerlo. Es una oferta que no corresponde a una demanda. Lo esencial sería ¿cómo despertar el interés para que se cuestionen los seres humanos sí quieren o no la salvación?” planteó.
Cantidad o calidad
Basado en su experiencia como misionero, Monseñor Solé profundiza en que la calidad de las personas que pertenecen a la misión debe ser más importante que la cantidad que responde a una invitación. “Evidentemente la cantidad de personas tiene un valor, pero no podemos olvidar que se tiene que convencer interiormente a personas que sean claves dentro de la comunidad que estamos evangelizando. Si buscamos la calidad de personas claves como representantes de una opción de fe radical y profunda empezaremos a tener apoyos que los sacerdotes muchas veces no tenemos. Cuando el sacerdote no llega por razones geográficas estas personas claves mantienen vivo el espíritu de la comunidad, la reúnen, la acompañan, la orientan y la organizan, detectan en la comunidad posibles necesidades. Esta labor no sustituye la del sacerdote, pero para la iglesia es un apoyo extraordinario” declaró.
Monseñor José Vicente Nácher Tatay, Arzobispo de Tegucigalpa (Honduras)
La fe cuando se comparte crece
Monseñor José Vicente Nácher Tatay, arzobispo español radicado también en Honduras desde el año 2000 y con 23 años de experiencia en misiones populares, considera que personalizar el evangelio es clave para las misiones a nivel mundial entre inmigrantes, por lo que propone la creación de centros católicos de escucha para hispanos, así como también establecer vínculos entre el inmigrante y su país de origen mediante la iglesia, además aseguró que cuando se comparte la fe, crece. Las propuestas han surgido durante su intervención en línea en el X Encuentro Formación Permanente para Sacerdotes –Identidad Sacerdotal– 2023.
Monseñor Nácher asevera que con la personalización de la evangelización se ofrece una alternativa en la lengua propia a los inmigrantes y que se está respondiendo a la sensación de soledad y a todas aquellas interrogantes que surgen con la llegada a un nuevo país. “Las misiones atienden necesidades inmediatas y no se debe olvidar lo específico de nuestro ser iglesia: la evangelización. La importancia de personalizar la evangelización es una de las claves de la misión. Cuando el inmigrante encuentra una misa en su lengua pareciera que no solo se le abre una puerta, sino que se le abre el corazón”, aseguró.
Basado en sus años de experiencia en misiones populares en la costa norte de Honduras, San Pedro Sula y la Mosquitia, el arzobispo de Tegucigalpa enfatiza que las causas por las cuales las personas emigran son diversas y multifactoriales, por lo que algunas de ellas podrían catalogarse como inconfesables. Por tal razón, surge la propuesta de la creación de centros de escucha católicos para migrantes. Donde un grupo de personas puedan canalizar el tipo de ayuda que cada individuo necesite para solventar su situación.
Del mismo modo, propone afianzar la relación cristiana entre el nuevo lugar de residencia y el país de origen del inmigrante, creando actividades locales con relevancia en la comunidad de procedencia, como la celebración de las fiestas patronales, entre otras.
Nardi Guerrero
Periodista.-